Considerada en ocasiones como la última cinta muda de la historia, Charles Chaplin dirige, escribe y protagoniza nuevamente al famoso Charlot para hacer una de las películas más influyentes de la historia, tanto en su nivel compositivo, como propositivo, y no solo eso, sino que sin estancarse en el género cómico, Chaplin explora la depresión norteamericana, el cine social, las distopías, las fallas de la revolución industrial y sus avances para con el capitalismo y sus daños colaterales, de una manera coreográficamente sorprendente, y cinematográficamente de una hechura excepcional.
Sobre la aventura donde Charlot trabaja en una fábrica vuelto un total autómata, que termina llevándole a la locura, y con esto mismo a la cárcel; Charlot decide conformarse con esto al darse cuenta que en ese mundo en el que vive es más fácil vivir en prisión que en un mundo ahogado en la pobreza y en la abundancia del desempleo, por lo que llega al nivel de delinquir solo para salir de esa verdadera carcel que para más de uno era la realidad; sin embargo todo cambia cuando conoce al personaje de Paulette Goddard, una chica pobre que va a ser arrestada por robar un pan, pero que Charlot salva para que ella conserve su libertad, sin embargo los chismosos la acusan y conserva su status de fujitiva. Ya juntos, en un vaivén de trabajos y aprisionamientos, van creciendo como pareja entre rutinas cómicas y desventuras sociales, hasta que encuentran un lugar de trabajo donde ella baila y el canta la canción Je Cherché apres Titine sin la letra real, sino con palabras inventadas, pues olvidó la canción, y cuando la vida parece pintar mejor, la policía reinterviene y toda esa nueva fantasía e idealidad termina, teniéndose al final solo el uno al otro.
Contenedora de algunas de las escenas más legendarias del cine, la cinta comienza mostrando a Charlot como un enano castroso, cuyas rutinas parecen un tanto predecibles y tontos, pero una vez que empieza a hacer pareja con Goddard, la cinta adquiere una magia natural donde la adorable pareja tiene que afrontar eventos no gratos de un mundo que no eligieron vivir.
Un gran clásico que hasta educativo debería de ser, por su amplia crítica a la situación social que refleja, así como los avances tecnológicos; una gran joya del cine de todos los tiempos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario