Si este año ha sido una porquería para todos hay un momento que seguro nos dolió a todos, y si no a todos, seguro sí a todos los cinéfilos: la muerte de T´Challa, el gran Black Panther Chadwick Boseman; yo recuerdo el día que murió y sí fue de las peores pérdidas para el medio pues un actor tan prometedor que apenas habíamos visto brillar enormemente al lado de los 5 Sangres y ahora se apagaba de la nada; incluso al verlo tan flaco en la película mencionada parecía más una modita de los famosos por estar extremadamente flacos por los prejuicios que uno tiene contra la farándula, pero es que tenía un agresivísimo cáncer de colón del que casi no hablaba para no distraer a la gente del talento que quería demostrar película por película. Lamentablemente nos enteramos de todo esto hasta que falleció, al estar en posproducción la última película en la que participó, la cinta en cuestión de la que conversaremos en esta entrada de nuestro cíclope blog.
Dirigida por George C Wolf con guión de Ruben Santiago Huson y basados en la obra de teatro de August Austin, a quien si no conocen también es guionista de la cinta Fences que también es producida por Denzel Washington, y a la que se le siente un hilo invisible de similitud que hasta ver quién era Austion me dije "ohhh por eso me recordó a Fences" y que incluso ambas películas eran parte de un acuerdo para ser filmadas allá por 2013 para HBO; sin embargo no sé exactamente qué pasó que Netflix terminó amparando el proyecto y salió hasta este año con Viola Davis y Boseman como los protagonistas.
La cinta sucede mayormente en un día caluroso del 27´cuando Ma Rainey (Davis) llega a Chicago para grabar. Ahí llegan los músicos primero y como una hora después llegará ella para tener un largo y pesado día donde sucede una recia confrontación de todos contra todos, los caprichos y traumas de cada frente en escena para grabar aunque sea una sola canción, y al final separarse y regresar a una realidad donde de no ser por la música no se respetaría en absoluto la vida de los personajes por su color de piel.
Sí, la premisa es simple, pero el tratamiento es más profundo de lo que podríamos imaginar. Para empezar el aspecto teatral, la manera en la que los actos se van desarrollando, soltando la psique y comportamientos de los personajes, desde el de Má, que es una señora terca, caprichosa y hasta hartante; hasta el de Levee (Boseman) que vendría a ser la contraparte de Má, simplemente por su espíritu libre, su deseo de triunfo y la manera en la que se va soltando su pasado como motivo para alcanzar a toda costa todos estos sueños y bríos que desde su primer escena se ve que tiene; esa desesperación por triunfo terminará volviéndose su propia perdición pues a cada minuto que avanza el film todo se va cada vez más lejos, teniendo un final bastante frustrante para el personaje y todo el subtexto que ya se plantó con cada diálogo y escena que fuimos viendo.
Los personajes secundarios son increíbles, la gente en general solo elogia las excelentes actuaciones de Boseman y Davis, pero cada uno de los otros actores son fantásticos, el cast armado con Colman Domingo, Glynn Turman, Michael Potts, Jeremy Shamos, Jonny Coyne, Taylour Paige y Dusan Brown es un rompecabezas perfecto que ayudan a plasmar la visión de Austin, y toda la esencia que una pieza como esta debería tener, pues meter música en un film, no solo como soundtrack, sino como tema es un aspecto bastante relevante, pues no debe ser acompañante, sino protagonista, y lo realizado por Wolf tiene éxito completo volviéndole de lo más destacado de este 2020.
La película es bastante recomendable si usted espera ver una puesta en escena de la talla de una excelente puesta teatral como un proyecto como este debería terminar siendo; no obstante si usted esperaba ver Wakanda por última vez o aunque sea ver una aventura blockbuster o alguna broma tonta como sucede en muchas de las recomendaciones básicas de Netflix, mejor absténgase y recuerde a Boseman por Marvel; ahora, si usted puede valorar una actuación por su finura, la capacidad de expresar sentimientos no solo presentes, sino pasados y futuros, y el grado de afectación que esta puede causar a usted como espectador, véala, pues sin duda esta ha sido la mejor actuación de esta finada figura que tanto prometía en el cine de los años por venir.
RIP CHADWICK BOSEMAN
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