Slenderman (2018)

Finalmente ha llegado la tan esperada película oficial del creepypasta favorito de todos los cybernautas, Slenderman, el personaje creado por Eric Knudsen, causando gran expectativa desde el anuncio de su hechura... no obstante, el trabajo del director Sylvain White termina más que decepcionando, fácilmente convirtiéndose en la peor película de lo que va del año, siendo una pieza terriblemente mal contada, estructurada y actuada... teniendo como única excepción la actuación de Joey King, quien pareciera aceptó el papel solo para continuar en su camino para convertirse de un momento a otro en la scream queen del mañana.
La película en general muestra el estudio del guionista David Birke sobre películas de horror y el personaje, pues a leguas se nota su tremendo desconocimiento del tema. Birke elige a 4 estelaristas basado claramente en los personajes principales de la famosa cinta noventera The Craft, 4 chicas outsiders (King/ Julia Goldani Tellez/ Jaz Sinclair/ Annalise Basso) que tienden a jugar con fuerzas místicas que no entienden. Obvio con eso llaman a la leyenda web Slenderman, quien empieza a asecharlas de una manera incomprensible y hasta risible en una serie de secuencias que no tienen ni pies ni cabeza, y no porque es una pieza dorada del surrealismo, sino porque ni Birke ni White tienen idea cómo llevar una simple película que al menos bien podía llenar el lugar tan frecuentemente llenado de película de horror B... pero no, ni eso... Ellos nos cuentan una película donde los adultos parecen adultos del universo Peanuts, que más que ideas y diálogos emiten sonidos de clarinete, mientras el total de los jóvenes corren idiotamente hacia un risco que ni siquiera es bien definido.... Para acabarla de regar, el personaje de Slenderman, ícono de la cultura millenial, ni siquiera es bien llevado, ni narrativa ni visualmente, pues cuando bien lo menos que se pudo hacer de él era volverlo del estilo de nuevos íconos como el Babadook o la siguiente promesa del estilo, Crookedman, en la cinta el casi innexistente personaje por el que se titula la cinta es un fantasma inexplicado, mal llevado y que realmente solo aterra al deficiente director y guionista del proyecto...
De si hay algo bueno, pues está cool seguir viendo a King y a Basso continuar su camino en el cine de horror, pero ya sería importante que empezaran a seleccionar sus proyectos para no terminar participando en cochinadas como la presente de la que escribo...
La película no es recomendable en absoluto, es una cochinada que demuestra lo peor de la generación millenial que en ningún sentido vale la pena ver por más que el personaje en cuestión les haya causado la menor de las intrigas... hasta cuando se satiriza al personaje en un episodio de la Ley y el Orden destaca muy por encima del total de esta porquería... MAL, MUY MAL