domingo, 21 de junio de 2015

Into the Woods (2014)

Dirigida por quien antes dirigiera Chicago & Nine, Rob Marshall, basado en el musical de Broadway escrito y musicalizado por Stephen Sondheim, Into the Woods es el musical del año que, como siempre, alocó a toda la academia, pues inteligentemente Marshall incluyó a Meryl Streep en el proyecto, y nominaciones aseguradas, pues nadie hubiera imaginado que la combinación musical + Streep pudiera resultar ¿o sí?
Pudiendo situarse en el universo de historias fantásticas modificadas, sí, el mismo donde más abundan cintas como Van Helsing o Hansel & Gretel, Sondheim nos elige sus cuentos favoritos y los rehace a manera que puedan combinarse y tengan una lógica narrativa:
El centro de la historia en sí, son el panadero (James Corden) y su esposa (Emily Blunt), quienes no pueden tener hijos, cosa que se justifica cuando la Bruja (Streep) se les aparece y les dice que es debido a una maldición que ella puso a su familia debido a que el padre de él le había robado unas abichuelas mágicas, por lo que, para quitar esta maldición, tendrán que conseguirle un manto capuchón rojo, una vaca blanca, una zapatilla dorada y un mechón de cabello rubio, cada requerimiento ligando con Caperucita Roja, Jack y las abichuelas mágicas, Cenicienta y Rapunzel, guiando a todos a un final feliz que se verá interrumpido por la llegada de una gigante enojada (Frances de la Tour) y un entramado de historias modificadas, algunas para bien, algunas para mal.
Completando el efectivamente genial elenco con Anna Kendrick, Chris Pine, Jhonny Depp, Tracey Ullman, Christine Baranski, Lilla Crawford, Daniel Huttlestone, MacKenzie Mauzy, entre otros, la cinta es bastante bien llevada (con las advertencias de que cantan todo el tiempo sin lógica alguna (sí, en un ojo no nos gustan los musicales en general)), sin embargo, hablando sin conocer la obra de Sondheim, hay bastantes huecos innecesarios perjudiciales como lo son las salidas de Blunt y Streep, o el encuentro entre Blunt y Pine, los que dejan bastantes sinsentidos flotando por ahí nada más con macabras sonrisas de inconclusas líneas o fáciles salidas de escena que hubieran podido contarse mejor; y esos casos que menciono son los más relevantes, pues excluyo bastantes más innombrables por aquí para evitar la lluvia de spoilers que eventos como esos pueden ocasionar.
La cinta entonces es bizarra y "entretenida", pero se demerita a sí misma con estos elementos ignorantemente inacreditables a Sondheim o a Marshall. Como sea, si usted gusta de los musicales seguro gustará de la cinta, y si no le gustan puede que aunque sea un poco; pese a todo los efectos son bastante aceptables y puede ubicarse como una aceptable cinta de fantasía pero sin destacar.








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