Paranorman (2012)

Dirigida por Sam Fell y Chris Butler, en una tradición de animación dark en la línea de Nightmare before Christmas y Coraline, Paranorman es una cinta que se respalda en su magnífica animación stop motion, una estética impecable y un cast original perfecto que incluye a John Goodman, Kodi Smit McPhee, Anna Kendrick, Casey Affleck, Leslie Mann, Bernard Hill, Christopher Mintz Plasse y la auténtica Silent Hill girl Jodelle Ferland, en un papel muuuuy similar a esa inolvidable personaje del cine de horror/ adaptación de videojuego. La cinta es honrada con nominaciones de oscar y un sin fin de premiaciones de animación, y se enfoca en el mensaje del error de la discriminación por prejuicios equívocos que con la unión se logran erradicar en una metáfora bella que hasta mensaje de noexlusión contemporánea podría tocar, poniendo explícitamente a uno de los personajes principales de gay.
La historia narra la vida de Norman, un niño que ve muertos, a quien nadie entiende -no todos los pekevidentes tienen un Bruce Willis-, que por incomprendido se las de deprimente -aún cuando su cuarto está más que coolmente decorado con muy buenos posters de zombies; vive con su hermana sexy fresa, su mamá lenta, y su gordo padre; en la escuela lo molesta el bully principal, Alvin; y de un momento a otro se hace amigo de un gordito muy buena onda llamado Neil, quien tiene un hermano musculoso llamado Mitch. Después, el tío vagabundo de Norman, Mr Prenderghast, le dice a su sobrino que algo está por suceder en lo que el poblado donde viven llaman La Maldición de la Bruja, y le dice a Norman que si no lee en la tumba de la bruja un libro, algo malo ocurrirá. Norman se equivoca y empieza a leer el libro en otro lado, y por el error, siete zombies asesinados por la bruja regresan, empezando una ola de terror en el pueblo, ola misma que se ve aminorada ante la psicosis social de la ya conocida chusma iracunda.
Sin ahondar en la trama para evitar spoilers, Norman y sus amigos deben resolver el caos desatado, usando sus poderes para vencer la maldición desatada, encontrando que la principal manera será venciendo los prejuicios de la sociedad en los que hasta el mismo protagonista se halla.
Un mensaje bonito tanto para los descriminantes de lo raro, como para los raros mismos, la cinta maneja la unidad, perdón y amistad como método de superación de los males, teniendo la historia de Norman como pretexto metafórico para encontrar el salvoconducto de los arquetipos negativos socialmente establecidos.
La cinta es totalmente recomendables, y hasta la pequeñez de la revelación de la sexualidad del personaje gay ayuda a la concretización de la idea de la no exclusión que durante toda la historia, los directores manejan. Así que véanla niños, adultos, familias y emos destruyendo las barreras que realmente a nadie le sirven, y contemplemos el fantástico arte del stop motion, que a parte de todo, la pieza utiliza con gran maestría y elocuencia.