jueves, 12 de octubre de 2017

Blade Runner (1982)

Si cuando Ridley Scott hizo Alien sorprendió al mundo revolucionando la ciencia ficción, tan solo tres años después vuelve al género, recreando el clásico literario de Phillip K Dick "¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?", pero mientras que en Alien nos lleva a una aventura estridente llena de acción y terror espacial, en Blade Runner mezcla esa ciencia ficción oscura con el estilo noir detectivezco y crea una de las más grandes obras scifi que se hayan filmado, una incursión a un futuro distópico donde la vida es cuestionada no por lo seres vivientes, sino por lo que estos mismos han generado...
Estelarizada por Harrison Ford, la historia sucede en Los Ángeles en 2019, luego de que el hombre haya incursionado en el universo con ayuda de súper androides esclavos llamados replicantes; éstos toman conciencia, y algunos escapan, asesinando a todos los que se opongan a su libertad. En la tierra se crea una comisión de agentes que les cazan llamados los blade runners, de los que destaca Rick Deckard (Ford), y es en él en quien se centra la cinta.
Harry Bryant (Emmet Walsh), ex supervisor de Deckard le busca para asignarle el caso de tres replicantes peligrosos sueltos: Zhora Salome (Joanna Cassidy), Pris Stratton (Daryl Hannah) y el líder, Roy Batty (Rutger Hauer); para esto irá siguiendo pistas que primeramente le llevarán a otra replicante buena llamada Rachael, la cual no sabe que es una androide, por lo que se empieza a acercar a Deckard buscando información sobre su origen; en el lapsus se irán enamorando ayudando a comprender el extraño grado de humanidad que tienen los replicantes.
Por otro lado se cuenta la historia del mismo Batty, quien no comprende la mortalidad de los suyos, así que empieza a investigar a los ingenieros que les crearon para tratar de evitar su final; llevándole primero a un científico con el síndrome de Matusalem llamado JF Sebastian (William Sanderson), y después al máximo creador, el Dr Tyrell (Joe Turkel), en quienes encontrará las mismas respuestas y soluciones que los que rezan hallan en sus dioses...
Lo inevitable en ambas líneas será el encuentro entre Deckard y Batty, y más que acción y ciencia ficción se verán inmiscuidos en la épica conclusión de la película.
Completando el cast con Edward James Olmos, y un excelente soundtrack de Vangelis; la cinta es un estudio existencialista en claroscuros, con una estética futurista que da pie al 90% del cine de ciencia ficción de los años siguientes, una trama intrigante digna de competir con lo más elegante del noir de todos los tiempos, un estilo cyberpunk que no solo trasciende en el mundo del cine, sino en todos los aspectos en los que el estilo tiene prescencia.
Sin duda, Blade Runner es un hito de la ciencia ficción, una obra maestra en toda la extensión de la palabra, cuyo único pero talvez sería el ritmo lento al comienzo, ajustándose a la narrativa que sugiere debe ser así; encontrando entonces una gran contra para los acostumbrados al trepidante ritmo que las otras películas del género suelen tener; no obstante, este ritmo es necesario para marcar congruencia con los temas tratados y la distopía significante en la que debemos sumergirnos para entender ese halo negro al que Ridley nos ha llevado.
La película es un clásico innevitable que cualquier cinéfilo debe conocer, una obra maestra de todos los tiempos, una piedra angular dentro de la historia del cine; una joya que si ya vio usted debería revistar.







No hay comentarios:

Publicar un comentario