viernes, 26 de enero de 2018

Cooties (2014)

Dirigida por Jonathan Milott y Cary Murnion, y escrita por Leigh Whannell, la traducida como Infectados, estrenada en Sundance del 2014, es una de las más especiales películas de ¿zombies? que se haya hecho desde Shaun of the Dead; contando con un elenco encabezado por Elijah Wood, la cinta ahora disponible en Netflix es una buenísima aventura de unos maestros contra un virus zombie que no solo tiene lo más básico en cuanto a reglas del cine Z, sino tiene una rítmica muy al estilo de Cabin Fever que gracias al buen elenco y el desarrollo típico de Whannell se torna una de esas gratas sorpresas fílmicas que no se dan ya tan a menudo.
La historia narra un día en la vida de Clint (Wood), quien despierta en la casa de su mamá hablando del libro que está escribiendo -¿en serio siguen poniendo a Wood como chavito? No, es uno de esos treintañeros que tiene que vivir en casa de su madre y conseguir trabajo como maestro al no haber alcanzado los sueños que se propuso *cita importante pues tiene que ver con el contenido de la cinta- Se levanta de su cama y se va a trabajar como maestro sustituto en la primaria en la que él mismo fue. Ahí conoceremos al resto del personal docente: Lucy (Allison Pill), una chica que también fue en esa primaria; Wade (Rainn Wilson), el profesor de educación física, alto y abusivo, novio de Lucy; Tracy (Jack McBrayer), el profesor gay de closet; Rebbekah (Nasim Pedrad), la republicana feminazi; Doug (el mismo Whannell), el profesor listo y raro; entre otros que ayudarán a poder matar sin restricción. Otro personaje importante será el chico que cuida el estacionamiento (Jorge García), que irá jugando un papel cada vez más importante cuando la invasión zombie comienza. Al comienzo de la cinta veremos el desarrollo/ convivencia de profesores con alumnado; es hasta que la primer niña zombie ataca a uno de sus compañeros cuando el virus se desata, encontrando con que este virus no afectará a los adultos, por lo que pese a que lastiman a Cunt, digo Clint, él no se vuelve zombie; entonces todos los monstruos ser infantes locos que buscarán aniquilar a cuanto adulto se les cruce en su camino, encontrando estos que solo lograrán sobrevivir trabajando unidos, usando sus conocimientos de maestro para salvar sus propias vidas.
Terminando siendo una chistosísima aventura, sí, muy comparable con la mencionada otra aventura de Simon Pegg -pero esa es insuperable-, la cinta, si fuera más conocida, bien podría volverse un gran clásico de horror reciente dentro del subgénero del horror cómico; sí, de la escuela de Ash y sus deadites y cuanta cinta zombie podamos recordar del periodo clásico del género. La peli es bastante recomendable, es diversión asegurada y sin duda de esta sí estaría bueno ver más aventuras de los que sobrevivieron a su miniholocausto zombie.











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