Dirigida por Jonathan Mostow tras su controvertida Terminator 3, la cinta es un sci-fi estelarizado por Bruce Willis con un personaje típico de lo que suele hacer pero sin caer el el clitché de si mismo... La película es medio dominguera, pero es pasable, ni la temática ni la construcción total del film la hacen una épica, pero es bastante entretenida y garantiza casi hora y media de no aburrimiento sin complicaciones de digestión mental.
Basada en el cómic de Robert Venditti y Brett Weldele, la cinta nos narra la Tierra en el año 2054, cuando los robots se perfeccionaron a tal grado que los humanos son reemplazados por ellos, y no de una matera postapocalíptica o distópica, sino para evitar accidentes o tener que ir al gimnasio, estos bellos sustitutos vivirán tu vida mientras tú los controlas desde la comodidad de tu hogar.
La historia nos narra cómo un hombre llega con unos sustitutos y los mata, y matándolos logra matar a los usuarios humanos, por lo que Bruce Willis y su pareja policiaca Radha Mitchell empiezan a investigar cómo fue eso posible, investigando al creador de los sustitutos (James Cromwell), y teniendo que meterse con la resistencia de humanos que no quieren usar sustitutos, liderados por Ving Rhames (con quien Willis no había trabajado desde Pulp Fiction), encontrando conspiraciones en contra de lo que los sustitutos significan para la humanidad, y teniendo que afrontar los usuarios, aunque no lo quieran la terrible realidad del envejecimiento y el engordamiento, entre otros males físicos de la realidad humana.
Traducida de título a "Identidad Sustituta", y teniendo también entre los personajes principales a Rosamund Pike, la cinta, como menciono, no es LA gran película de ciencia ficción, pero tampoco cae en la chafada o la inmundicia. Es entretenida, es pasable y no pasa nada si la ven o no ven... Pero con todo esto, es más recomendable que muchas, y seguro no pasará un mal rato viéndola.
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