Internacionalizada como Train to Busan es una cinta zombie estrenada en Cannes en 2016, jamás pensada para ser distribuida en occidente -más que talvez en uno o dos festivales, no sé, talvez- que gracias a las redes sociales se ha vuelto EL fenómeno de horror talvez más destacado de lo que va del año, compitiendo con grandes blockbusters como Counjuring 2, y la aplaudida Witch (que en sí es del 2015, pero se distribuyó bien hasta 2016). El Tren a Busan de pronto estuvo en el gusto de todos los opinólogos de las redes, así que no nos podíamos quedar fuera del fenómeno, y la vimos.
Dirigida por Yeon Sang Ho, la historia tiene un intro un tanto inexplicable: atropeyan a un venadito y se vuelve zombie... y ya, no vuelven hablar al respecto, no salen más animales zombies, no...
Luego ya empieza con la trama verdadera, la historia se centrará en Seok (Gong Yoo) y su hija Soo An (Kim Su An), justo el día de su cumpleaños, cuando Seok le lleva un wii de regalo, pero ya lo tenía; siendo éste el punto de quiebra cuando la niña le pide que la lleve con su mamá (están divorciados) a Busan, y ya, que la deje con ella. El padre acepta, se suben al tren, y la aventura comienza.
En el tren se irán llenando los arquetipos más clásicos del cine zombie, mientras el papá se va mostrando cada vez más egoista; es un asesor financiero; y ya que se desata la persecusión, peor persona se va volviendo. En el camino se irán revelando los personajes secundarios más relevantes: El rudo Sang Hwa (Ma Dong Seok) y su esposa embarazada Seong (Jung Yumi), un grupo de estudiantes, un par de señoras, el conductor del tren, un ¿azafato? y el empresario peor de egoísta que el papá, que poco a poco se irá mostrando ante él como un reflejo futuro que no querrá volverse.
Entonces, resumiendo, la historia ocurre en el tren; como hay invasión no podrán hacer paradas sino hasta llegar a Busan. Ahí, cada personaje sacará lo mejor y peor de sí, teniéndose entonces, como se lee, algo sencillo, algo B, algo irrelevante... No obstante, la manera en la que es llevada empatiza inmediatamente con los personajes, usa lo mejor del género de los años recientes y más clásicos, los efectos especiales no le piden nada a Hollywood, y sin duda sí se puede situar entre las mejores películas del año; no solo de horror, sino entre todo lo que el cine nos ha dado de enero para acá...
Comparable primeramente con la ovacionada Guerra Mundial Z, a la que supera con creces -la hollywoodense es una forzada sobreexplotación del género-; y como mayor halago, comparable con el clasiquísimo Dawn of the Dead, tanto con la original con el excelente remake; bien aplaudiéndose entonces ésta cinta como una de las mejores películas de zombies de los años recientes.
Como leen, entonces, la cinta es absolutamente recomendable, googleenla y fácilmente la hallarán, porque para que llegue legalmente a América mucho trabajo tendrá que pasar... chance ni en Netflix, pero es fácil de hallar en google, así que no pierdan más el tiempo leyendo la reseña, ¡corran a googlearla! ¡Véanla!
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