El año, escaso, desde el mundo que gira hasta la pantalla grande, escasos, tan escaso que hasta el cierre del hobbit decepcionó, la mayoría de buenas cintas no se distribuyó suficientemente, aún cuando se anunció que Nymphomaniac estaría en Cinépolis se tenía que comprar boletos un par de semanas antes, y al final hasta se proyectó en más de una cinta, el cine de arte, como siempre, es ignorado e intercambiado por seis copias en español del blockbuster de la temporada; pero como ustedes han de saber yo no soy un detractor del blockbuster, seré odiador de muchas cosas, pero son, esencialmente, los blockbusters los que nos han vuelto cinéfilos, y nos han hecho después indagar en cintas mejor desarrolladas y sus raíces de biblioteca. Los blockbusters de este año se dividieron entre una estupenda historia de crímenes políticos con El Capitán América, y las nefastas Transformers 4 y Maléfica, que sí, sí fuimos al cine a verlos, pero en espera que en esa gula cinéfila nos topemos con el siguiente Jurassic Park o Matrix... El Soldado de Invierno fue una de esas sorpresas... Aún así, en la lista reducida forzosamente de adiciones a este top 10, un par más le ganaron a ésta varias veces mencionada...
10. Purge 2: Anarchy
La primera parte es un tanto irrelevante, la idea es súper
buena, pero seguro por el presupuesto tuvo que pasar de lado, sin embargo, por
el suficiente éxito de esta primera entrega, el mismo director James DeMonaco,
amplia los horizontes de su mitología donde la economía justifica el exterminio
de los pobres con pretextos burdos quasirealistas (lamentablemente), pero ahora
con causas y efectos, con desenvolvimiento de las clases sociales, las salvajes
forzadas por la pobreza y las hipócritas controladoras del poder que son las
originadoras de lo que pasa cada año como parte de sus purgas.
Purge es incluida en la lista más que nada porque el terror
es un género a tomarse en cuenta, y ésta, pese a sus derivados de acción es por
muy encima del resto, la mejor propuesta de este año, sin tener que requerir de
la gigantesca campaña que la película Annabelle tuvo que tener para dejar de
lado sus faltas y deficiencias... Quizás con la mercadotecnia de Annabelle, The
Purge Anarchy hubiera podido subir al escalón de las inmortales y consagrarse
como debiera... El tiempo lo dirá, pero a cómo va, mínimo se prevé se vuelva
una cinta del grado de importancia de sagas como Saw.
9. Dawn of the Planet
of the Apes
Ciencia ficción, dos cosas a considerarse, su pasado lejano
como una de las más grandes sagas del género que hayan existido, aún con sus
últimas aburridas y chafaronas entregas de salida; y la segunda cosa es el
hecho de que esa saga tiene tanto tiempo que actualmente no tiene el peso de la
memoria que pudiera llegar a tener, pues entre toda la ola de superhéroes que
ha habido, El Planeta de los Simios, pese a la buena historia de la versión de
2011 (la de James Franco) no tomado fuerza verdadera entre las nuevas
generaciones, quizás por la publicidad insuficiente, quizás por el recuerdo
fétido de la versión de Tim Burton, pero luego de esta segunda entrega de la
nueva era del Planeta de los Simios, aún con el rechazo de Franco para volver a
la saga, podemos decir que desde la construcción narrativa hasta la muy buena
actuación de Andy Serkins la cinta puede radicar en ese punto medio entre la
ciencia ficción lujosa tipo Alien, y el afamado estilo de Grindhouse de la
exageración que en los últimos tiempos se ha puesto tan de moda. La película es
un excelente trabajo en ese hábitat que entretiene y te sumerge para esperar
que la colección resucite grandiosamente y le dé el valor que en algún momento
tuvo la saga original.
Cabe mencionar el hecho de los cortometrajes de internet que
se hicieron para completar lo sucedido entre las dos películas, pues introduce
a la saga a este nuevo estilo
multimediático que en este mundo se ha vuelto tan necesario simplemente por el
hecho de "estar al día".
8. La Danza de la Realidad
Pese a su papel en la historia, últimamente Jodorowsky se ha
vuelto una entidad ambivalente, comparado en las redes sociales con esperpentos
como Paulo Cohelo, y el hecho de su papel en el performance en México, la
manera en la que primero hizo Fando & Liz, y la fuerza global con las que
su filmografía posterior fue recibida en el mundo, son trivialidades que a la
gente parece no importar, y quizás, por su reciente estilo mesiánico que se ha
dado causa esa ola de repulsión desatada que ciega de cualquier acción que el
chileno haga, y asuste al resto que no sabe qué opinar de él.
Pues en 2013 Jodorowsky volvió con la cinta autobiográfica
La Danza de la Realidad, pero como suele pasar, la distribución le alentó lo
suficiente para que la mayoría de su público se diera más éste año que la élite
selecta que pudo ver este trabajo el año de su estreno.
Y ¿qué pasó? Comparada con el estilo de Fellini, pero
manteniendo ese halo metafísico que el señor suele usar, Jodorowsky nos deja
una cinta deleitante que hace una introspección en la manera de que el mundo
giraba para él cuando niño, y que al final terminó siendo lo que lo llevó a
ser, gústele a quien le guste, el ícono artístico literario cinematográfico que
ahora es.
La cinta es una joya del cine de arte, y una fantástica
cachetada de guante blanco contra todos esos incomplacidos que navegan con
bandera de geniales en el trolloso mundo de las redes opinólogas.
7. Only lovers left alive
Otro atraso garrafal, otro ícono, otro pateado, otro
desconsiderado: Jarmusch.
La nueva película de Jarmusch empezó a hacer eco entre los
medios independientes como un nuevo tesoro rondante, de esas leyendas que todos
queremos ver, pero que si exhiben son solo por días en cines selectos y con
costos mayores... Al final, el "diga no a la piratería" se vuelve la
mayor falacia que puede existir en el mundo del arte, y más del arte
seleccionado (¿teorías de conspiración?) Pero al final, he ahí el medio para
saltarnos a las distribuidoras y poder gozar con perfecciones como ésta.
Jarmusch entonces salta a un género defecado por la saga de
Crepúsculo y lo retoma con las reglas básicas, el romanticismo real intrínseco
y la levedad sagrada del director, salvando la mitología vampirezca y haciendo
de un argumento tan sencillo un deleite cinematográfico como pocas veces se ve.
Claro está que el hecho de las actuaciones de Swinton & Hiddleston hacen
que el contenido completo sea un compendio perfecto de una historia amorosa
inmortal más allá de los nuevos clichés y los estereotipos del horror.
6. Guardianes de la Galaxia
¿La controversia de mi lista? No, dejémonos de poses y
autentícense; no hay pose adecuada en creer que todo blockbuster es una basura,
y que por traer un árbol y un mapache ya es seguro una porquería; el Señor de
los Anillos tenía árboles y todos lo amamos, Donde viven los monstruos tenía
animales parlantes como base de la historia y a todos les encantó, así que eso
demuestra la pose, y remarca el hecho de que solo viendo las películas podemos
juzgar si realmente es buena o mala, y en el experimento marvel de éste año se
demostró que ésta historia starwarizada es una odisea magnífica con el grupo de
outsiders más memorable que se haya filmado, pues teniéndolos a la par de
grupos como Avengers como su máximo comparable podemos ver de un lado el ideal
capitalista sobre el concepto de superhéroe, todos cool, todos omnipotentes, y
sin caer en lo patético de Spiderman, tenemos a los Guardianes de la Galaxia,
que guiados por Starlord nos demostraron que los más grandes menospreciados del
universo son capaces de detener una amenaza espacial usando humor y un estilo
único y divertido que sin duda la hace destacar entre todo el cine de
superhéroes que haya habido. Una muy entretenida y única cinta de superhéroes
alternativos que amplían los límites y las fronteras del género con una
maestría del director James Gunn que avergonzaría a Favreau en su mejor
momento. Un nuevo clásico.
5. Interstellar
A partir de éste número enseriamos, y dejamos los spots para
géneros específicos para hablar de lo mejor definitivo del cine de éste año,
comenzando en el puesto número cinco con la nueva de los Nolan: Interstellar.
Aunque sabemos, lo hemos tratado en el blog de un ojo, que
Christopher Nolan sí está sobrevaluado, sin duda sí es uno de los mejores
directores de su generación pintando a ser tan grande como los más grandes al
final de su carrera, que esperamos diste de terminar, pues desde su destacada
pero cuestionable saga de Batman, hasta su intro experimental y sus posteriores
Inception y ahora Interstellar, su estilo empieza a destacar y como escalera de
Escher su mente empieza a verse totalmente en su trabajo: Y bien sabemos que un
director verdadero debe de ver su alma reflejada en los minutos de sus
filmaciones, o solo es producto de un presupuesto y los caprichos de la
industria invirtiendo a favor de su economía. Nolan ya es un creador en proceso
de canonización autoral y nos hay duda alguna de eso.
En su nueva cinta explora el futuro no tan lejano ni
exagerado con un apocalipsis obvio aproximándose, nos habla de la exploración
espacial en busca de salvación utilizando el vértigo de la teoría de la
relatividad y luego el de la quinta dimensión, teniendo aquí esa escalera
mencionada, por la que, como laberinto, los personajes tendrán que encontrar
sus caminos, pasando de este ensueño futurista a un drama padre hija conmovedor
motivador que pese a su longitud será de un goce perpetuo, una meditación post-ending
y un sentir continuo de las dimensiones
y realidades pasando entre nuestra piel tal como el personaje de McConaughey lo
hace.
La mención final aquí es para Hans Zimmer, que nuevamente
aparece haciendo magistral soundtrack como no lo hiciera desde Inception, y
viendo cuánto disfruta trabajar en las películas de los Nolan pues da lo mejor
de sí, y de entre sus millares de colaboraciones se ve que es cuando está a
gusto que da el máximo desempeño para crear los mejores soundtrack de los que
tengamos memoria.
4. Nymphomaniac
La prueba del año de que las distribuidoras deben de
alejarse del tabú y recordar que no mueven libros de autoayuda sino piezas
artísticas; esto en mención introductoria a cómo tenemos que escarbar hasta
hallar nuestras películas esperadas antes de tener conocimiento de si sí y si
dónde estarán las películas mejor hechas del año simplemente por el hecho de
que las distribuidoras piensan que a nadie le interesará verlas...
Luego de volverse el non-grato de Cannes, Lars Von Trier
vuelve queriendo provocar, y pues tras el Anticristo y Melancolía, con un
título como Nymphomaniac, y hasta musicalizando el tráiler con Rammstein, lo
único que uno espera es que fuera lo más potente del director, sin embargo, él
no decepciona, sino se aleja de ésta idea de impacto, y trata la película sobre
historias y comparación alrededor de lo que le pasa a Joe (Gainsbourg/Martin),
una ninfómana nata, cuya vida se le va complicando poco a poco, y teniendo que
primeramente la idea de la inmoralidad de su condición parece divertida y
golosa, antojable, pero justo en el quiebre entre la primera y segunda parte,
donde ella dice "ya no sentir nada", su condición se vuelve una
enfermedad decadente, de la que se siente quisiera escapar, pero entre su
ansiedad y necesidad, su edad y su entorno la situación se acompleja y se haya
insolucionable... El final, sin spoilear, es vacío, sombrío, pero no impactante
como uno hubiese esperado de todo el mito de su creación que se formó durante
la filmación...
Si hablo de su falta de impacto ¿porqué estaría entonces en
el cuarto lugar de la lista? La maestría del director, su sabiduría
constructiva, su visión creativa es lo que hace al director; a Von Trier lo
recordamos por su transgresión, pero si hablamos solo de factura, el trabajo en
general del director es un compendio de obras maestras: la estructura, la
sonorización, el mito, la yuxtaposición, el mood... Y Von Trier es un genio en
este sentido, un indispensable del cine actual y un futuro pilar para las
generaciones del mañana; y Nymphomaniac no es la excepción, es una maravilla
artística indispensable, contada de una manera elegante pese a su temática "vulgar"
cuyo organigrama le hace una pieza precisa y bella como pocas personas pueden
lograrlo, una obra de arte absoluta y una imperdible de la cinematografía de
todos los tiempos.
3. Gone Girl
Ben Affleck nuevamente...En 2012, ya con su popularidad
diluida en ácido cítrico, Affleck dirige Argo dejándonos con la boca abierta,
atragantándonos con nuestras palabras, y viendo que ese Ken cinematográfico, en
su madurez, había encontrado una faceta entre la genialidad y la casualidad que
se pondría a prueba los años por venir... Luego se anuncia que sería Batman, y
todos vuelven a dejar de creer en él... Y éste año reaparece como estelar del
mismísimo David Fincher, sí ese que no solo hizo Alien 3 y el Fight Club, sino
que lleva dos cintas seguidas que inmediatamente se volvieron clásicos, La Red
Social & La Chica del Dragón Tatuado... ¿Será otra reivindicación de
Affleck para su carrera? ¿Será ésta la película catalogadora de su talento?
¿Qué hará Fincher para lograr esto?
Estereotiparlo, hacer de él, lo que la gente piensa y
explotarle; pues aunque basada en el libro de Gillian Flynn, el personaje de
Affleck es demasiado Affleck, y pese a no ser el centro de atención en la
cinta, se hace a sí mismo espléndidamente, dando nuevamente, en esa
caricaturización de sí mismo un personaje entrañable e inolvidable...
Pero si no es él el centro de la película ¿quién es? ¿qué no
era él el protagonista? ¿si no destacó por encima del resto como se puede
aplaudir entonces su trabajo? Affleck hace del personaje que Fincher le hizo
específicamente como debería de hacerse, pero lo que vuelve genial a la cinta
es ese personaje malévolo que termina llevándose la historia desde el primer
momento que aparece, y es lo que la coloca en el tercer puesto de la lista, y
ese personaje es la adorable, maquiavélica y enfermiza Amazing Amy ¡La actriz
del año! Rosamund Pike, quien no obstante la buena actuación de Affleck, no
obstante la carrera épica de Fincher, empuja a todos en su camino, llevándose
la película y haciendo a una de las más complejas personalidades del cine que
se hayan visto en los últimos tiempos; es ella la que alza la película más allá
de su construcción general y la inmortaliza y la hace, cuando se estrena, lo
mejor que haya habido en 2014... Sin embargo el año siguió y nos dejó dos
películas más que complementarán el resto de la lista...
2. Boyhood
Llega diciembre y empiezan a surgir las listas de lo mejor
del año, y varias veces se repite ésta película... Ah, es de Linklater, el de Escuela
del Rock y Scanner Darkly... Sigue saliendo en listas... checo cuándo sale en
México, el año que entra... Sigue saliendo... Cuánta arrogancia la de
Francia... Sigue saliendo... Seguro está sobrevaluada... Sigue saliendo... Ya
¿No? ... Sigue saliendo... ¡Está bien! ¡Está bien! La busco en internet:
Va bien... Ah, mira qué bonito, empieza con Yellow de
Coldplay... Linda, interesante... Oye, el niño ya creció ¿cuánto se tardarían
en filmarla? Oye, la creció demasiado ¿es el mismo niño? SOS Wikipedia... ¡No!
¿En serio? ¿Linklater hizo eso? ¡Nahh!... No mames, ¡No!, ¡No mames! ¡Qué
bello! ¡No mames! ¡Qué belleza!... Atardecer: Fin...
Eso soy yo viendo Boyhood, esa película que si no existiera
12 Años de Esclavo, se llamaría 12 años, pues es el tiempo que tarda la
filmación, son los mismos cuatro actores principales: Ethan Hawke, Patricia
Arquette, y los excelentes actorcitos-actorzotes Ellar Coltrane y la hija de
Linklater, Lorelei, ellos llevando doce años de vida de los personajes,
mostrados en situaciones taaan normales, que lo único que Linklater retrata es
la belleza de la vida, el transcurso del tiempo resumido en casi tres horas,
con soundtracks con los que todos convivimos, con preocupaciones que todos hemos
vivido, con sueños, con desilusiones, con situaciones... tan complicado y tan
fácil que la vuelven un hermoso compendio vital muy bien valorado que si no
existiera la película que pongo en el primer lugar seguro sería la mejor
película del año, solo por demostrar que en sencillez está lo complejo y la
complexión está la esencia de lo básico; una cinta preciosa que es un manjar
para cualquier cinéfilo y cualquier viviente...
1. Birdman
La cumbre de nuestro Negro Iñárritu es la cumbre del año...
Ese que hizo la mejor película mexicana de la historia, considerada por muchos
y por mí también, Amores Perros, luego se internacionalizó y terminó de esa
manera su trilogía de la muerte, para después perder a Guillermo Arriaga y su destino se volvió
incierto... El biutiful lapsus fue vivido, y luego el anuncio de una comedia
negra... ¿Comedia? ¿Como Adam Sandler? Vaya...
(Las siguientes palabras favor de musicalizarse con la
batería de Antonio Sánchez)"El cuarto huele a bolas"... La
perspectiva de ese género alguna vez comentado por el mismo Iñárritu como el
cáncer del cine, ahora abordado artísticamente por el director; ¿qué hace? toma
el súper ícono que inicia todo, Michael Keaton, y va hacia adelante... El cine
es símbolo, es representación, toma a ese que fue superhéroe y lo repudió, toma
al antihéroe, a Edward Norton, Hulk fue un evento que no debería de volver a
vivir... La dama más bella del cine de superhéroes actual, a la que todo fanboy
quisiera de novia, Emma Stone... ¿hablamos de la prospecto de la fama? como
supuesto solo mencionaremos para finalizar a Naomi Watts como una especie de
continuación a su trabajo de Mullholland Drive, pero repito, solo como
supuesto... Ok, harás una cinta artística sobre el blockbuster, con simbolismos
hacia el mundo concurrente, pero ¿cómo la realizarás? Fuiste reconocido por
ser, pese a la buena realización y factura de la saga de la muerte, como una
copia de lo que Tarantino hacía en sus primeros años, pero la oscuridad
subsecuente puso interrogantes a los seguidores ¿qué harás al respecto? Usa tus
herramientas para reconstruir como nunca antes, usa a ese ícono ignorado como
la base de la estructura, usa lo más valioso que has conservado: al Chivo
Lubezki, has un plano frecuencia, contemporiza el cine, vuélvelo tuyo, hazlo
reaccionar para ti, no reacciones tú para él, toma el mayor riesgo de tu vida,
explota ¡vuela!
La línea previa narra los preestrenos y el estreno de un
nuevo despertar, narra a Michael Keaton rehaciéndose, narra al mundo
juzgándole, narra a los hipster frente a la naturaleza humana de sobresalir, y
sobre la negación ambiciosa de los cinco minutos de fama; el éxito, como pocas
veces sucede, debería de durar para siempre, y servir éste para alumbrar la
oscura vida que nos ha tocado vivir; pero el mundo no hace artistas, hace
celebridades, ¿cómo superar esto? ¿reaccionando? ¿existiendo? ¿meta-existiendo?
Iñárritu nos narra la batalla por el ego, por la deprimencia, por la muerte,
pues la muerte no es el cese de la vida, sino el cese de la existencia, y la
existencia es la vigencia, por lo que la falta de ésta es la verdadera muerte,
la muerte en vida que se suele tener y es taaan difícil de superar... de eso
trata Birdman, siendo el género de superhéroes un simple contexto que se aborda
como antes pudo haber sido tratada sobre un actor que no podía escapar de
representar a Hamlet o Mefisto; sí, la cinta tiene una temática eterna pese a
lo contemporánea que resulta, y se vuelve entonces la piedra del arca del mexicano,
consagrándole como alguna vez Felllini se consagrara con 8 1/2, Godard con Band
Apart, o Kurosawa con los Siete Samurai... Es el momento de Iñárritu y nos
festejársele sería celoso e hipócrita, pues su cinta es una celebración
artística per se que le vuelve genio comprobado y una entidad fílmica única y
destacada, no solo en el hoy, sino en el siempre...
EPÍLOGO
El año pasa por glorias, pero por más desgracias que buenos
momentos, vimos a Aronofsky pudrirse en su patética Noah, a Angelina Jolie
sobresalir con la porquería que Maléfica fue, algo que habla de la idiosincrasia
global como malenfocada (sí, vuelvo a
culpar las estrategias de la distribución, que bien encaminadas podrían ayudar
a una utópica reeducación), vimos echar a perder la saga de 300 que ni Eva
Green pudo sacar adelante, a Sin City caer en el desprecio gracias a su
postergación continúa que ha llevado a Robert Rodríguez a graves problemas
legales, tuvimos otra espectacular pero malísima entrega del nuevo y popular
Peter Parker con Amazing Spiderman 2... mientras que el contexto mexicano en general no fue
tan bueno como supónese fue, pues teniendo solamente La Dictadura Perfecta como
única cinta destacada, es importante el hecho de que para nada es el mejor
trabajo del director Luis Estrada, mientras que el resto de películas
mexicanas, encabezadas por la populachera y desgraciable cinta de Güiri Güiri
"El Crimen del Cácaro Gumaro" fue una ola de dinero tirado a la
idiotez demostrando hacia donde suele fluir el capital cinematográfico de la
industria mexicana.
En el delay distribuidor tuvimos este año otros excelentes
productos como 12 Años de Esclavitud, La Vida de Adele, Dallas Buyers Club,
American Hustle, entre otros, pero el hecho de conocerlas más por sus premios
óscares que por su mercadotecnia nos hace sentir terriblemente sobre el hecho
de que cuando las cintas ya hasta fueron condecoradas en otros países, en
México apenas empiezan su plan de distribución ¿te suena el caso de Oldboy y
Grand Piano?
Como sea, el año ha terminado, y con este trayecto que
tuvimos, el 2015 no tenemos ni la puta idea de cómo será, pero citando a
Powerman 5000, podemos concluir que "its over for now, it seems, or
atleast until yesterday begins again: Tomorrow" (ha terminado por ahora,
parece ser, o por lo menos hasta que ayer comience nuevamente: Mañana)
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