Estelarizada por los favoritos de la academia Billy Crystal y Meg Ryan; la historia narra, como el título dice, sobre cuando Harry conoce a Sally. Él sale con una amiga de ella, pero aún así él le tira el calzón, y al ser una chica buena, Sally lo rechaza diciendo que mejor sean amigos. Él dice que un hombre y una mujer no pueden ser amigos, pues la necesidad de sexo siempre estará presente... Ella se queda traumada con esa idea, no pasa nada más que los años...
5 años después se reencuentran, ella tiene novio, él se va a casar... no pasa nada.
5 años después se reencuentran, ella perdió a su novio, él está divorciándose; él ha madurado y ya pueden ser amigos ¿en realidad no piensa en sexo ya?
Aquí comienza su romance apoyado por sus amigos (Bruno Kirby & Carrie Fisher), teniendo una conclusión obvia pese a bonita... melosidad melosidad ¿qué hemos desatado?
La película incluye la que para muchos es una escena clave de la historia del cine, la cual es cuando Ryan finge un orgasmo en una cafetería; pero en realidad, viéndola en retrospectiva es una escena equiz que bien podría ser superada por escenas varias de películas como Sweetest Thing del 2002, pero igual da lo mismo, con el tiempo las comedias románticas pasarán de Reiner y Allen a Kutcher y Kunis, desprestigiando el género por completo, y talvez influyendo en este pesimismo reseñador...
La película no es mala para nada, ¿pero épica? una película más que sobrevalorada, que quizás solo hay que ver para entender a los miles de haters del Hollywood en una etapa previa a los noventas, que queda solo como momento histórico tibio y no glorioso..
No hay comentarios:
Publicar un comentario