Fantastic Four (2005)

Una vez Spiderman y X-Men abren paso a una tendencia que mezcla la ciencia ficción con el cine de acción con la cultura pop, una ola de nuevas cintas de superhéroes se dejan venir, algunas totalmente fenomenales, algunas absolutamente destructivas readaptando las páginas popularizadas a lo largo de casi un siglo al capricho de nuevos adquisitores quien aún pensaban que ser fieles a las historietas era algo contraproducente para el cine, y uno de estos ejemplos es la dupla de Fantastic Four, que empieza con una primera parte bastante deficiente que halla su clímax de malhechura en su pésima secuela; pero bueno, reseñemos, la adaptación de Los Cuatro Fantásticos queda a cargo del director Tim Story, a quien parece elegir sin razón para ningún lado (en cuanto a su curriculum refiere), tomando a Ioan Gruffurd, Jessica Alba, Chris Evans, Michael Chiklis y Julian McMahon para estelar su concepción.
La historia entonces comienza con el triángulo amoroso entre Reed Richards (Gruffurd), Sue Storm (Alba) y Victor Von Doom, quienes tienen una pelea de egos, teniendo que Sue quiere quedarse con Reed, pero éste, envuelto en sus experimentos no llega a concebirlo, algo de Doom tolera solo por el respeto científico hacia Richards. El equipo lo completan Ben Grimm (Chiklis), el mejor amigo de Richards y Johnny Storm (Evans), el hermano de Sue. Doom los lleva a una misión en el espacio donde son expuestos a rayos en el espacio y al volver a la Tierra todos empiezan a experimentar físicamente los efectos del incidente, siendo que Richards se vuelve elástico, Sue invisible, Grimm se vuelve de roca y Johnny de fuego, mientras que Doom tiene extraños poderes magnéticos además de empezar a carcomersele el rostro y tener que dejar su status de playboy atrás. Los primeros cuatro se vuelven entonces Los 4 Fantásticos y Doom el villano, teniendo como primer gran arma el hecho de la "La Mole" quiere dejar de ser "La Mole", así que su plan es demolelizarlo para que cuando los fantásticos se le enfrenten sea fácil y él termine gobernando al mundo.
Entonces, desde la trama y las actuaciones hasta la adaptación, la cinta es fofa, tonta, demeritante para el espectador, y se vuelve una película dominguera que demerita esa naciente era de superhéroes que pronto dominará a Hollywood pese a lo que pase... No obstante, lo que viene será peor.
La película es recomendable para niños, gente que no prestará atención, gente que dormirá... es de esos eventos de los últimos años que hubiera sido mejor que no sucediera.