Trayendo de vuelta al creador del concepto, Christopher Landon, en esta ocasión encontramos que la historia es un tanto diferente, pues otravez comenzamos en el día en el que Theresa aparece en el cuarto de Carter (Israel Broussard), pero ahora desde la perspectiva de su amigo/roomie, Ryan (Phi Vu), quien cuando se da cuenta de que él está en el loop asesino, también pide ayuda a Carter, y la única que se da cuenta qué sucede es Tree -así le dicen a Theresa-, por lo que le ayuda, pero ayudándole se da cuenta que Ryan y sus amigos de ciencias son los culpables de los loops, pues han estado creando aparatos basados en teorías de física cuántica, no obstante, cuando ella les ayuda hay un accidente, y el loop comienza nuevamente, pero esta ocasión en un universo paralelo, donde Carter anda con otra, y la mamá de Tree sigue viva -en la uno se menciona que está muerta y por eso no se lleva muy bien con su papá, porque aparte es el cumpleaños de ambas el mismo día- por lo que ahora no solo es escapar del asesino y del loop, esta ocasión Tree tendrá que decidir si tratar de arreglar el problema y dejar a su mamá viva en esa dimensión o volver a la realidad donde el tiempo sí avanza y es novia de Carter ¡qué dilema nivel decisión de Sofía!
Conservando el dinamismo de la 1 y el buen humor de Rothe eso es lo que saca la película a flote, pues en esta ocasión en terror pasa a un tercer nivel, y le sustituye la ciencia ficción... no obstante, la crítica tomó bien la entrega e igualmente el público fue suficiente como para no tener nada que lamentar.
Ahora se habla de una tercera parte, Landon dice que sí, Blumhouse, la casa productora, no está tan segura, pero no dice que no, no dice que sí; se dice que Landon escribía el guión, pero todos son rumores digitales y nada más... ya veremos si sí persiste la franquicia o queda en esas dos y ya...
Por lo mientras pueden hallarlas ambas en HBO, para pasar un rato entretenido dentro de la cuarentena.
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