The Nun (2018)

Cuando se anunció la hechura de The Nun no había duda que la codicia había sobrepasado a la saga del Conjuro... Eran ilusos, créanme, si ustedes se habían emocionado por este proyecto de un personaje de relleno, que por muy cool que luciera en sus escenas, era de obviarse que solo sería hecho para exprimir más y más la franquicia en una era postsuperhéroes donde se ha demostrado que unir películas vende... las series venden... Iluso igualmente sería creer que aún con todo mi pesimismo no vería la película....
Dirigida por Corin Hardy, y situada en Rumania en 1952, la cinta se vende como la máxima precuela de la saga, el verdadero origen del mal, aún cuando hay demasiadas secuencias chacaleadas de otras cintas y una que otra jalada que nos demuestra que no importa cuán ancestral sean los demonios, no hay nada que un buen escopetazo no pueda parar.
Estelarizada por Taissa Farmiga, Demian Bichir, Bonnie Aarons y Jonas Bloquet, la cinta inicia con el suicidio de una monja que escapa de un mal poderosísimo que ni nos imaginamos de qué se trata... El Vaticano manda a Bichir a investigar qué rollo y lo mandan misteriosamente ayudado por la novicia Farmiga; ayudados por el francocanadiense Franchute (Bloquet), los clérigos llegan a la abadía donde todo esto sucede, y poco a poco se van envolviendo en sucesos satánicos que cada vez van teniendo menos y menos sentido, al grado de que el final parece la secuencia de las enfermeras de Silent Hill... Sí, pasan bastantes cosas, cada cosa más fantasiosa que la anterior, pero al final no llega a estar ni cerca de lo más chafa de la peor del resto de la saga.... y aún así me gustó más de lo que esperaría que me gustara...
¿qué, qué?
¿No estaba tirando mierda y diciendo cuanta sandéz pensaba? No; como inicié el texto, cuando me enteré del proyecto mi expectativa bajó suficiente como para que cuando leí las malas críticas iniciales no fuera afectado... sabía que sería un producto de codicia y nada más, pero con la calidad del buen hollywood de horror que siempre nos había gustado... no sería una película B cualquiera, pero tampoco se acercaría ni por poco al status de leyenda que Annabelle o el Counjuring ya tenían... no obstante, pese a todos los contras, la película se mantiene en el más o menos, pero un poco más que menos, entretiene, te hace quejar, y queda como ese capítulo innecesario que al final seguramente llevó al cine a millones de fans from horror...
¿Que si puedo decir algo bueno de la cinta? Pues Bichir suele destacar, se apega al guión, hace lo que debía... y la música de Abel Korzeniowski es bastante acertada en las secuencias satánicas justo cuando es necesario... bien por eso...
La película entonces no se acerca ni por poco al status de culto que todos esperamos presenciar, pero tampoco es basura pura como en el caso de la recientemente vista Slenderman.... ya ustedes sabrán si verla o no, o hacer como si ni siquiera hubiese existido. Amén