Top 10 2015

Volviéndose ya una tradición anual, para acabar 2015 hay que aplaudir a la más grandes del año, las cuales salieron en esta ocasión más de la búsqueda que de la distribución, pues para poder ver más cine ya no es suficiente pasar semana tras semana frente a la gran pantalla, pues entre que solo los blockbusters llenan las salas y que el buen cine casi pasa desapercibido, la única alternativa es contrarear a las distribuidoras y ser cinéfilo a cualquier precio, negando ver las ardillitas, escupiendo en cochinadas como Pixeles, conectándose con grupos de cinéfilos en las redes sociales, la única manera de poder ver las máximas películas es rechazando sus tendenciosas y menospreciantes actitudes. La lista obviamente es subjetiva, y aún así muy limitada, pues bien, según he oído, hubiera sido excelente ver películas como Straight Outta Compton, las Sufragistas o Macbeth, pero entre la mala distribución como la falta de tiempo quedarán excluídas de la lista... con lo que hubo, al final nuestras 10 películas favoritas del año fueron:

10. Green Inferno

Si bien la película no es el máximo hit del horror de todos los tiempos, sí es la mejor película de horror del año; éste homenaje al cine de caníbales de Eli Roth es un buen material crítico, estéticamente deleitante, a nivel gore, además de ser una excelente representación para el horror contemporáneo con un estilo posmodernista heredero del mejor tipo de cine posmo de la tendencia tarantinezca que ha inspirado a tantos cineastas de los años pasados cercanos. Green Inferno talvez tiene como única competidora en el género a Knock Knock del mismo Roth, pero pese a que ésta también es una genialidad en cuanto a burlas e historia -e igual es un homenaje a otra cinta- es Green Inferno la que logra superar su primer clásico (Hostal) y le sitúa al director como uno de los indispensables del horror contemporáneo.

9. Le Petit Prince

La dirigida por Mark Osbourne fue quizás la más difícil de seleccionar, pues en un año donde cintas como Star Wars o Avengers no llenaron nuestras expectativas, uno pensaría que el cine animado "para niños" sería peor ¿no? pero no, tres absolutas joyas de la animación fueron hechas este año (ésta, Inside Out y Peanuts), y elegir entre las tres fue lo más difícil de la lista; a fuerza, sin excusas alguna de éstas tres debía tener el honor de pertencer a los elogios del año ¿cómo elegir o porqué ésta y no otra? Inside Out es una preciosura, pero su lazo directo con el estilo visual y argumental con el resto de las Pixar la vuelve un hilo de oro de un telar de excelencia, pero es tan pixar que le falta un poco individualidad; Peanits, por otro lado tiene toda la individualidad necesaria, su estilo es totalmente respetuoso con el producto original, pero la historia es sencilla, simple y bonita, mientras que en el Principito, no solo hay estilo visual excelente, argumento respetuoso para con el original, pero el extra aquí es la moraleja y la adaptación hacia los niños de hoy en día, y los adultos de infancia arruinada por el mundo echado a perder. El Principito descontextualiza su original y contextualiza la actualidad a su servicio, volviendo para Un Ojo la mejor película animada del año, en un año con una competencia digna que nos recuerda no demeritar el medio, pues mejores trabajos hubo aquí que tantas películas de live action que se hicieron.

8. Wolfpack

El primer documental incluído en una lista top del año es este fantástico documental que más que tratar la rareza de la familia Angulo habla de la cinefilia como el escape para cualquiera que fuese la realidad que le haya tocado a quien fuese. Los chavitos que no son permitidos a salir de su apartamento viven la vida que no puede gracias a la pantalla que les transmite historias de Burton, Nolan, Tarantino, etc, inspirándoles personalidades que nunca pudieron ser copiadas de grupos externos en los que los que sí convivimos nos basamos.
En la película no se llega a ningun lado, pero es genial ver ese paso de su realidad a la realidad, mostrando en ese momento que una realidad acomplejada por x situación puede ser un trama tan perfecto para ser un largometraje como una historia escrita podría ser.

7. I Smile Back

Otra de las películas de las que no oímos, ni creemos oír en México es el drama estelarizado por Sarah Silverman, donde la actriz pasa de su sarcasmo habitual a un drama sobre la depresión que nos muestras las aptitudes histriónicas sorprendente de la actriz, a nivel tan grande como antes lo hicera por ejemplo Jim Carrey de pasar de su comedia famosa a cintas como Truman Show o Eternal Sunshine.
La película se vuelve tan bella gracias a Silverman, y por eso se sitúa en este punto de la lista y la consideramos de las mejores del año.

6. Beasts of No Nation

Otro evento importante del año: Netflix; y con esto no digo que Beast of No Nation sea grande por estar en Netflix, sino que en este tiempo donde las distribuidoras hacen lo que se les de la gana, pensando que todos somos unos idiotas y queremos ver en 10 salas Alvin y las Ardillas; Netflix sale al quite trayéndonos material de calidad que si queremos vemos a la hora que queramos cuando queramos. Iniciando con series ahora elementales como Orange is the New Black a series de Marvel como Daredevil y Jessica Jones, Beasts of No Nation es una producción de Netflix de la más alta calidad contándonos la historia de un niño soldado de la más cruenta y realista manera; cada uno de los participantes de la producción da todo de sí para hacer ésta una de las mejores películas del año, y todos la pudimos ver gracias a Netflix sin tener que esperar a ver si las distribuidoras empiezan a ver si es conveniente para nosotros verla o no.
Ojalá que el medio empiece a trabajar directamente con Sundance o Cannes para que todos tengamos acceso al mejor cine del mundo como debiera ser. Que al final, el cine sirva para ver explosiones e invasiones extraterrestres que terminará siendo la única razón para visitar las salas.

5. Hateful Eight

Empiezan las máximas cinco.
Si Tarantino hace una cinta, sería increíble que no se le incluyera en las listas de lo mejor ¿no? en un blog que se la pasa comparando todo con el trabajo del director, pues ¿cómo no?
El Octavo proyecto tarantinezco queda en quinto lugar pues se compone de un estilo como nunca antes de había visto en el autor, pasando de su estilo pop usado en películas como Kill Bill o Inglorious Basterds a un estilo literario-teatral que acentúa la narrativa exquisitamente, encontrando aquí la maduración del artista camino al final de su carrera cinematográfica -según-. Tarantino escoge a su cast (uno de sus mejores) de su catálogo de clásicos (Madsen, Roth, Jackson, Bell, etc) y los sitúa a todos a lucirse en una habitación por casi tres horas.
La tensión generada se muestra elegantemente y la vuelve una de las indispensables de su filmografía, sitúandola a su vez como una joya cinematográfica invaluable.

4. Trumbo

Sí, aún no sale en México, y quien sabe si salga, pero la nueva participación de Cranston en una película trae de vuelta la más alta calidad histriónica que se veía ya perdida por fiazcos como Godzila o minisegmentos como pasa en Contagio, brindándole nuevamente al actorazo la oportunidad de lucirse de la mejor manera, como alguien de su talla lo debe hacer.
La historia del guionista de izquierda Trumbo es llevada por el director Roach tiene un mood jazzero muy móvil que deleitará al más contreras crítico que usted conozca, contará una historia inteligente y propositiva y no aburrirá ni al más desesperado espectador que pueda existir.
Su lugar lo merece por todo esto, remarcando una vez más lo fascinante que es ver a Cranston actuar como él mejor sabe por casi dos horas recordándonos lo bello que es ver una película que cumpla con las expectativas que uno tiene ante titanes del gremio como éste.

3. The Martian

La nueva película de Ridley Scott es una completa maravilla que podría subtitularse con "o como hacer una excelente película hollywoodense", pues como nos tiene acostumbrados, Scott nos muestra su maestría en el medio, teniendo una película con excelentes efectos especiales, producciones gigantezcas, la clase A de Hollywood en toda su extensión, bromas de vez en cuando sin caer en lo estúpido, y una historia con final feliz, excelentemente bien hecha e inteligente; siendo un material blockbuster que no tiene la necesidad de ser basura como piensan las casas productoras que un blockbuster debería ser (véase Transformers, Rápido y Furioso, etc). Scott despliega lo mejor que Hollywood tiene para reacreditarse y regresar un poco de confianza en el semillero más grande del mundo para el séptimo arte.

2. The Revenant

Tras Birdman, uo esperaría que lo siguiente de Iñárritu sería bueno, pero no otravez algo tan perfecto como ésta fue; la nieve da sed, la búsqueda de DiCaprio por el óscar ya da risa, se dice que la cinta sería lenta... si se ve más que nada es porque es Iñárritu, es mexicano, es bueno, etc, etc, etc, pero casi tres horas de Di Caprio solo en el bosque... nahhh, seguro será aburridona...
¿Qué qué?!!! Es imposible parpadear, se quita el aliento, te maravilla los ojos, Lubezki es un genio, es un constructor de imágenes de la talla de Kubrick, que digo de Kubrick, ¡De Rembrandt! DeCaprio solo en el bosque sin decir nada ¡Increíble! Actuar, hablar, expresarse solo con la mirada, es el mejor actor del año, ¡es un grande! Y ¿qué decir de Hardy? Es fabuloso ver el paso del actor de cinta a cinta, donde se reconstruye, rehace su voz, se replantea a sí mismo cada película que hace. Todo armado perfectamente para ser una nueva joya de la historia del cine, poniendo a Iñárritu ya al nivel del ya mencionado Kubrick o Fellini, que, cada proyecto que hacía uno podía estar 1000% seguro que sería escuela y gemas totales para el séptimo arte.
The Revenant es una nueva genialidad que le sitúa casi a la cabeza entre nuestras 10 favoritas este año, solo abajo de...

1. Mad Max Fury Road

Póngase soundtrack porfavor, comencemos. ¿Porqué si Revenant fue más que elogiada queda debajo de Mad Max?
Uno jamás esperaría que la cuarta parte de la saga de George Miller, quien hasta Babe andaba haciendo, tendría todo lo que hace fantástico al cine: emoción, construcción, estética, trama retorcido, distopía, guerra, ambición, locura... si no es la película más profunda que exista, el ballet expresivo motorizado de Miller es una exquisitez visual que uno podría visitar y revisitar cuantas veces fuera, pues es un claro ejemplo de lo que el arte cinematográfico tiene la capacidad de hacer, teniendo la herencia del mismo Meliés, que construía sus sets para hacer magia completado por la edición, acá Miller vuelve de lo grabado, realmente realizado, un espectáculo total que apantallaría a cualquiera que tuviera la suerte de presenciar.
Fury Road se volvió un clásico instantaneo que quedará como lo mejor que nos pasó en el año, y que nos devuelve la fé en el cine, y nos recuerda lo feliz y satisfactorio que es ser cinéfilo, arraigándonos enteramente a su producto, y saber, sin dudarlo, que Mad Max ha sido nuestra película favorita del año, y nadie podrá negar que todo lo dicho es verdad...

Feliz 2016 para todos, mucho cine para ustedes y miles de reseñas más desde un ojo