The Expendables (2010)

Antes las hordas cinéfilas no iban en busca de Wolverine o Iron Man para exteriorizar su hombre de acción interno, sino que eran héroes como Stallone, Van Damme, o Schwarzenegger en quienes esos machos alfa oprimidos veían su máxima masculinidad desarrollándose... Los tiempos cambiaron, la ciencia ficción y los efectos especiales dominaron y no importó que tan grande fueses o los años de estudio de las artes marciales que hayas llevado, estos héroes dejaron de importar... Sin embargo a finales de la primera década del siglo XXI el retro nostálgico por los ochentas y noventas dieron la oportunidad de que nuevamente proyectos muertos resucitaran y si sabían aprovechar esta nueva vieja ola triunfaran; y ese fue el caso de los traducidos como Los Indestructibles, quien el mismo Sylvester Stallone sabe capitalizar retomando a muchos de los héroes de ese antaño tiempo, y los utiliza para crear un crossover de ruquitos repitiendo sus glorias pasadas para deleite de la fanaticada en general.
Sobre el grupo de Barney Ross (Stallone), quien va de un punto a otro librando batallas contra mercenarios de todo el mundo, y son contratados por un misterioso personaje (Bruce Willis) para derrocar a un dictador sudamericano de una isla ficticia llamada Vilena, todo como un doble plan donde ellos se sacrificarían en la misión dejando a la CIA como los verdaderos héroes que a la par arrestarían a un mafioso llamado Monroe (Eric Roberts), pero para cuando Ross quiere abandonar ya se ha enamorado del contacto en Vilena (Giselle Itié) y tendrá que hallar la manera de salvarla, salvar a su equipo y no caer en la emboscada que la CIA les preparaba.
Completando al equipo expendable con su brazo derecho Jason Statham, acompañado de Mickey Rourke, Jet Li, Dolph Lundgren, Terry Crews y Randy Couture, además de tener de enemigos a gente como Stone Cold Steve Austin y David Zayas, y entre los extras no solo a Willis sino al mismo Schwarzenegger y Antonio Banderas, la cinta no vale la pena por el hecho de su construcción cinematográfica, sino por la unión de tantas leyendas del cine de acción, que utilizando esa nostalgia en incremento le permitirá a Stallone la explotación de la tendencia para retomar a los más grandes del género, no importando cuanto botox haya de por medio.
Recomendable sobre todo para los más grandes amantes del género de acción, para los sabidos enemigos del mismo ni se acerquen a la cajita ni del blockbuster ni de la piratería.