Y finalmente llega mi turno de topear
las mejores para mí de éste año… honestamente para mí no fue un tan mal año,
pero sí, sin duda, los primeros meses fueron los mejores para degustar el cine…
ya después fueron esporádicas, y el montoncito del final… incluso las que
empiezan a salir entre las nominadas para los óscares del año que entra tampoco
suenan tan “me da tristeza que a las distribuidoras les valgamos verga”… no,
obviamente hubiera estado feliz de ver Eternity Gates, Creed o Infiltrado en el
KKKlan el año que salieron, pero pues las distribuidoras nos creen no aptos
para verlas a su tiempo y poder disfrutarlas en tiempo… ya lo diría Ernesto
Juárez en su texto, como que sí quieren un perfil capitalino sureño para poder
disfrutar de lo mejor del cine del año… yo no me quejo de los blockbusters,
como él lo hace, pero ¿porqué deciden que hay cine para los de la zona de los
que dirigen las distribuciones, y los del resto de la república? Está bien que
destaca la ignorancia en el país, pero desde mi experiencia y punto de vista,
la única solución para la ignorancia es el conocimiento, si acostumbras a la
perrada a que el cine de Eugenio Derbéz es lo que deben de ver, obviamente es
lo que van a pedirte… Algo destacado de este año fue la sobresaturación de Roma
por todos lados, pese a que Cinépolis se negó a ceder para exponerla, la gente
creyó que Roma era algo que tenía que ver… una vez la pusieron en Netflix
muchos se arrepintieron, pues no hay bromas o canciones con las que ellos se
divirtieran, pero siempre hay que recordar que el cine no solo es
entretenimiento sino arte, y el arte no tiene porqué ser entretenido siempre,
es más introspectivo… bueno, no ahondo.
Como menciono, mi lista sí tiene
blockbusters, amo y defiendo los blockbusters porque no podemos ser tan cínicos
como para negar que fueron estos los que nos hicieron amar el séptimo arte… o
sino, díganme treintones lectores, ¿no amaban Back to the future o Jurassic
Park cuando decidieron que les gustaba de mirar películas? ¿Creen que por
gustar de Bergman ya no pueden gustar de Jaws? No, no, no… Kubrick mismo pasó
por ahí con Spartacus… las grandes producciones destacan desde Eisenstein al
racista de Griffith, a Cleopatra a los 10 Mandamientos… cada blockbuster nos
hace amar más las capacidades épicas del cine… y no por gustar de Avengers no
pueden disfrutar a Von Trier… dejemos el cinismo de lado y amemos y disfrutemos
lo gigante del cine.
No puedo negar que pese a tener
grandes favoritas instantáneas me costó trabajo rellenar la lista, pero desde un
videoclip de 2 horas y la recreación de un concierto completo para la gran
pantalla hasta el chasquido que Thanos, puedo decir que para mí ha sido un año
bastante interesante en el cine, y más teniendo el año pasado cochinadas como
Ragnarok…
Mi lista contiene también experimentos
transgresores de los últimos días, películas que las salas exhibieron 2 días y
cintas cuyo género es rechazado por los grandes académicos… el horror tuvo
momentos de auge y calidad digna de la inmortalidad; la animación se lució de
maneras pulcras y callabocas… 2018 para mí ha sido una grata experiencia y mi
lista lo denota… espero el año que entra siga ahogado en un cine increíble que
enorgullezca esta cinefilia con la que vivo y que sea también para ustedes una
experiencia tan llenadora como casi siempre lo es para mí… Nos vemos pronto…
Un homenaje a uno de los más grandes
íconos de la música es perfectamente bien representado por Rami Malek, dirigido
por Brian Singer, se logra casi hacer un videoclip fílmico que concluye con una
épica secuencia de recreación del Live Aid.
La Gran Sorpresa de fin de año no viene
a ser un live action de nuestro amigable amigo trepamuros, sino una cinta
animada que se ve forzada a introducir a un nuevo Spiderman, Miles Morales,
logrando evadir su desconocimiento general gracias una estética y guión que
hacen honor a la épica frase de Stan Lee: Excelsior!
El primer proyecto fílmico interactivo
cae a cargo de Netflix como proyecto especial de la serie de ciencia ficción
Black Mirror. El experimento termina siendo de las propuestas más disruptivas
de los últimos años.
Ninguneada por muchos lados, pero
sacada adelante gracias a la maestría fílmica de su director, Pascal Laugier,
quien cuenta una historia sencilla pero perfectamente bien llevada para traer
más de una sorpresa iniciando con un estilo muy conocido pero que va virando inteligentemente
para volverse de lo más destacado del año.
¿En serio hay que decir algo al
respecto? ¿En serio alguien pensaría que Wes Anderson fallaría en cualquiera de
los proyectos que inicia? Obvio no. Nuevamente el director pone hasta el más
ínfimo de los detalles en su estilo personalizado que lo hace reconocible en
cualquiera de los proyectos que aborde.
La menos esperada del año Marvel, pero
la más grata sorpresa del año. Ryan Coogler se discute un universo desconocido
por la mayoría de los espectadores y narra una historia difícil de desagradar
pues gracias a su emoción y bienhechura se logra una de las sagas más
prometedoras del MCU.
Odiada por muchos, y gustada por otros
tantos, Von Trier genera una meditación/reflexión con respecto a todo esa negritud
social que le han recargado para crear a esta figura asesina que en su estilo
tan personal navega entre la autocontemplación y narcisismo y el sadismo
ilimitado y la condena dantesca.
El fenómeno mediático sorpresa de
Netflix demuestra la calidad de uno de los 3 Compadres, Alfonso Cuarón, quien
no solo hace una pieza dorada en cuanto a técnica y hechura en general, sino
que se torna un total simbolista narrativo cuya magia fílmica se torna un
clásico hispano que hará escuela y hará a más de uno hablar de sí.
La consagración del nuevo cine de
horror satánico y el histrionismo de Tony Colette se ven más marcados que nunca
gracias a esta joya de Ari Aster, quien muy al estilo del nuevo cine de horror
nos sumerge en un infierno en vida gracias a la negritud de uno de los
proyectos más auténticos de los últimos tiempos
Igualmente menospreciada
por bastantes, la gran superproducción superheróica del año aparece gracias al
MCU. La hechura y magnificencia se basa más que nada en la consagración de toda
la franquicia, la cual se ve facilitada gracias al trabajo de 10 años donde se
tuvo el tiempo de ahondar en toda esta mitología, solo para tener este momento
cumbre en esta precisa película.
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