What if (2013)

Dirigida por Michael Dowse, esta un tanto tediosa epopeya hipster, secuela del siglo XXI de la enfermedad de Woody Allen, con sus fluídos diálogos veloces, en este caso más escatológicos que inteligentes, y sus innecesarias complicaciones sociales de la clase triunfadora media alta, tiene de protagonico al en aquel momento controversial ex Harry Potter Daniel Radcliff, quien tras apantallar con lo realizado en Kill your Darlings se introduce a esta comedia romántica donde aguantarse la ganas de andar con la amiga se vuelve la cruz de la popular friendzone que nuestra cultura de redes sociales ahora a iconizado como un status popular al cual alcanzar, por lo que en la fácil vida que los personajes llevan parece que el mundo se resume en el dilema de besar a alguien que te gusta pero tiene novio y solo te considera su amigo en ese feliz mundo que fluye con música de ukulele que a cualquier amante de los iphones le podría gustar.
Sobre Wallace (Radcliff), quien luego de un año de traumatismo tras terminar con una bonita relación se decide ir a una fiesta a conocer gente, y ahí se encuentra a la novia de su mejor amigo, Chantry (Zoe Kazan), de la que inmediatamente se enamora, pero como tiene novio, nada pasa del parlanchín vínculo amistoso desarrollado desde entonces; por lo que, mientras la vida sigue caminando en el éxito de todos los personajes (como pasa en la vida real...) ellos crean una friendzone cuyo lazo sexual es innevitable, que todo mundo ansía sea quebrantado menos la moral de ambos combianda en carácter mojigato e hipócrita que ambos manejan en toda la película.
Titulada al español "Solo Amigos" (pues eso significa What if ¿no?... ¿no?), la cinta es una ardua competidora con Her para ser la máxima película hipster, teniendo que esta es más realista que Her, pero la otra es un paraiso absoluto de esa tendencia tan mezquina que abunda en el mundo que vivimos hoy.
La cinta, que claramente es derivativa de Woody Allen (por eso ya la doble mención), empieza aburrida, fofa, tendenciosa, romanticosa, y concluyente en lo que cualquier comedia romántica tendría como final; cabe mencionar que la animaciones de la imaginación de Kazan se sienten forzadas, como si fuera fan de La Ciencia del Sueño de Michel Gondry, más que una buena idea, como lo resultasen los flash animados de cintas como Natural Born Killers...
Por lo que si usted es hipster esta es la película para usted, si los odia: no, si le dan igual: talvez, si no: no sé.... (que final tan hipster para una reseña de un ojo) ahora, a sacar los monóculos.