jueves, 29 de diciembre de 2016

Top 10 2016

Como cada año les dejamos nuestro Top 10 de las que considero fueron las diez películas que consideramos mejores este 2016. Sin duda fue difícil por el año tan horrible que resultó ser… no solo políticamente el año resultó una total porquería, el cine también estuvo lleno de fiascos y promesas no cumplidas, como lo he venido diciendo reseña tras reseña, revista tras revista, pero bueno, analizando, éstas son las películas que más consideramos relevantes en este año decadente y viciado.



De título proveniente del clásico de Griffith de 1915, la película sobre Nat Turner estelarizada, dirigida y producida por Nat Parker, sin duda no es una obra maestra como uno esperaría que hubiera sido, y más con el meollo de Sundance, su ovación de pie y demás; no obstante, la ubico en la lista por esta contrapropuesta a tan significante película en tan significante año. Entre Donald Trump y las constantes noticias sobre policías sometiendo a ciudadanos de raza negra en Estados Unidos, la introducción de una película como esta es un recordatorio de la importancia del discurso cinematográfico en el plano social del día con día. Relevante más que sólida…




Ninguneada primero, después aplaudida por la red, luego difundida, trascendida a la internacionalización y finalmente hatereada. Estaciones recorridas salvándose de zombies.
En sí TTB es una película básica de zombies. ¿Entonces cuál es su relevancia? Desde que Walking Dead se estrenó, el cine de zombies decayó totalmente, porque ¿quién quiere ver cine de zombies cuando lo puede ver cada domingo con personajes que ya domina, que ya comprende? El género zombie es B de raíz, entre fines de los 90´s e inicios del siglo XXI ha crecido fuertemente pues correr de seres a los que no nos pesa matar ¿quién no lo disfruta? El cine decayó entre malas historias y rebuscadas salidas, pero ahora con TTB lo más básico del género vuelve, la crítica social, las aventuras y corretizas, todo regresa. TTB se encuentra en puesto 9 porque hace homenaje a lo mejor del género tomando un poco del zombie actual iniciado sobre todo en Guerra Mundial Z.




Como saben, soy gran fan de la que he llamado La Era de los Superhéroes, el género ha sido de lo mejor que nos ha topado vivir a la generación nini; pero las últimas entregas nos han dejado demasiado qué desear, y ese auge que hubo entre Watchmen, Avengers y El Caballero de la Noche ha concluido, ha pasado a nuevas joyas como las series de Netflix o CW. Cada película que salió sobre superhéroes este año era desilusión tras desilusión. Batman con su estupidez de Martha, Capitán América con su guerra civil de diez personas; Dr Strange tiene excelentes efectos especiales, pero al final es un producto burdo y vacío; y Suicide Squad y X-Men… no me hagan hablar más de ellas, déjenme olvidar…
La excepción aquí fue Deadpool, la de bajo presupuesto de bajas expectativas resultó la más grata supersorpresa del año; pues dejando de lado la pretensión, y basando lo más relevante en un guión muy bien hecho, se logró sacar una de las mejores películas de superhéroes que podamos regresar.

Ahora sabemos que los avaros y desconocedores productores hicieron a Tim Miller dimitir, y el futuro de la franquicia se ve difuso, y nada nos garantice se vuelva a repetir de la manera en la que se hizo… Se cuenta que el antihéroe saldrá en Logan en 2017, pero solo son rumores no confirmados, que de ser reales sería algo bastante arriesgado al meter al jocoso personaje en la que se ve será la película más seria sobre el favorito X-Man.




Cuando escuché sobre el proyecto creí que Disney echaría a perder uno de mis clásicos favoritos más allá de mi infancia –pues no estoy taaaan viejo-, ya que escuché que entre las piedras angulares del proyecto se encontraban Jon Favreau y Bill Murray, al menos le di oportunidad de verla; alguna tarde de miércoles, un martes, cuando fuera, no me importaba; pero después de verla terminé con una satisfacción inesperada, pues la manera en la que Favreau respetó hasta al más mínimo detalle de la original, revivió la fe en la compañía, y nos dejó en espera de los siguientes remakes live action que Disney nos dice que sacará.
El que sigue es La Bella y la Bestia con Emma Watson… y la verdad, estoy igual o más incrédulo del proyecto que cuando me enteré del nuevo Libro de la Selva…




La que para muchos fue su película favorita del año, para mí fue de las mejores, pero no la mejor. Leía sus reseñas para saber opiniones, y veía que hablaban sobre el tiempo, sobre aliens, etcétera. Pero yo la veo desde una perspectiva diferente; La Llegada para mí es de mis películas favoritas del año por la manera en la que estudia la lingüística, el estudio de los símbolos extraterrestres se me hizo lo más interesante del nuevo proyecto de Villaneuve; el debate entre qué es más importante, si la ciencia o la lengua; en ningún momento lo resuelven, pero el dilema es bello; y en este mismo estudio del lenguaje de los aliens aparece esa mención del tiempo y la linealidad de éste, de la concepción existencialista y la mirada humana, primitiva, del todo constituidor del universo, que termina siendo el mensaje primordial, desde mi punto de vista, de esta destacada película.




Recomendación de una alumna mía –ya había visto el poster, pero no se me antojaba porque pensaba que era una especie de wanabe Wes Anderson wanabe Lil Miss Sunshine-, llegué también incrédulo a ésta; pero a cada minuto que pasó fui viendo a Viggo Mortensen en el mejor papel de su vida –y eso que soy totalmente fan de Aragon LOTR-, en una de las historias más originales en uno de los roadtrips más divertidos que me haya tocado ver. El guión del mismo director Matt Ross es una preciosa joya sobre el uso de pensamientos progresistas afrontándose minuto a minuto con la ferocidad capitalista que premia al hedonismo y la facilidad como máximas cumbres de alcance. En la película, el personaje de Mortensen lucha por llevarle la contra y llevar a su familia al verdadero ideal “marxista” “chomskiano” que pueda brindar. Una belleza.




La nueva película de Gibson, la que se dice le redimirá es una dualidad inesperada que, en efecto, puede situarse, sin duda, entre las mejores películas bélicas de las que tengamos memoria. Dividida en dos actos, como antes lo hiciera Full Metal Jacket; acá Gibson decide hacer un primer acto muy agradable, tirándole a lo chistoso, contrastando con el violentísimo acto siguiente, cuya fuerza reitera la idea de heroísmo que la historia del soldado Doss debe tener. Andrew Garfield hace todo para salirse de su escupido spiderman, y logra adaptarse perfecto a la interpretación del soldado real, y se torna el héroe que representa.
El proyecto sin duda es de lo mejor del año, pero no lo máximo, primeramente por el cast de Vince Vaughn que termina siendo el máximo error para el perfeccionamiento de la cinta ideal del redimido Gibson.




El año pasado me esperé hasta ver The Force Awakens para hacer mi top. Rabié, escupí úlceras. No me interesaba ayudar a que el spinoff sacavaro ayude a llenar los bolsillos de los insultantes productores. –eso significaba que no quería ir al estreno, no que no la iba a ver :P- Pero gran sorpresa, ¡tremenda sorpresa! Sí, la película empieza un poco lenta, pero una vez que sale Peter Cushing, ya no pudimos separar nuestros ojos de la pantalla; la acción va en ascenso, dejando suficiente tiempo para crear sin prisas a cada uno de los tripulantes de la nave Rogue One hasta llegar a la hermosa batalla de clímax final, que ya comparé con las geniales secuencias visuales de Guardianes de la Galaxia, pero cada que la pienso más, me remonta a un tremendo ballet digital, con unos movimientos de cámara que hacen de ese universo de la calidad que el mito amerita… y hablando de mitos, la escena final de Darth Vader ¡WOW!, 2016 estuvo lleno de decepciones, pero como ven, fueron las sorpresas lo que hicieron mis momentos cinematográficos. Rogue One fue la mejor sorpresa que me haya topado este año; no por nada a la fecha ya he ido a ver la película varias veces.




Y como todo y todo, Rogue one no fue lo mejor que hizo Diego Luna este año, fue su proyecto independiente Mr Pig.
Desconocida por la mayoría, pues forma parte de las películas que las distribuidoras creen que el público no necesita ver; la película es una destacada historia sobre la humanidad al borde de la muerte, la superación, la resistencia, todo encarnado en el personaje del increíble Danny Glover, quien tiene que hacer un roadtrip a México para cerrar su vida llena de errores, buscando una vida digna para lo que queda de su familia.
La cinta es tan sencilla como cualquier película independiente sería, pero es esa sencillez, ese “minimalismo”, lo que acrecenta los rasgos humanos, y recuerda que la base del arte es esa humanidad que nos describe y asemeja, haciendo de cualquiera de la vertientes artísticas una reflexión sobre qué hacemos aquí, y qué tenemos que hacer con el tiempo que “aleatoriamente” nos han dado para disponer de él.




Curioso resultado final, pues elegir una película de horror como la película del año es algo inusual; pero si analizamos el valor constructivo, artístico, de propuesta, y de originalidad que el proyecto de Robert Eggers es una joya inmediata de la cinematografía de todos los tiempos; comparable en cuanto a repercusión a monstruos fílmicos como Nosferatu, El Exorcista o El Resplandor; sencilla como nuestro puesto número 2, pero de una manera más clásica, más de época, con solo pocos personajes, pero indispensables para narrar una historia que nos hace confundir el terror mágico de las brujas con el salvajismo religioso de los primeros colonos de Estados Unidos, fenómeno hipócrita sucedido similar en distintas partes del mundo…

La Bruja es la película más importante de 2016, aunque es del 2015, pero es esta misma mala distribución mundial la que casi echa a perder este tan importante proyecto que debió de haber salido en su momento para todos, y no enterrarla hasta que todos clamaran por su proyección para evitar esta muerte prematura, que un insulto a la cinematografía hubiera sido. Al final, esta magnificencia a lo macabro se torna lo mejor del año, ésta sin sorpresas, pues al ser una ópera prima, producción independiente, no había nada qué esperar, solo ver, y esperar ser sorprendidos, como lo logra, como trasciende. Ya veremos cómo les queda el remake de Nosferatu, que será el siguiente proyecto que Eggers dirigirá.


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