It Follows (2014)

Dirigida por David Robert Mitchell, estrenada en Cannes, y traída a México casi desapercibida en 2015 con el título de "Está detrás de ti", It Follows vendría a ser más un fenómeno digital que de salas, al menos en el caso mexicano. La cinta es parte del catálogo de Netflix, y gracias al fenómeno orgánico de las redes sociales, persona a persona todos nos fuimos enterando de la existencia de este fantástico fenómeno del horror actual, volviéndola de un momento a otro el nuevo clásco que se ha vuelto hasta ahora.
Estelarizada por Maika Monroe, Keir Gilchrist, Daniel Zovatto, Lili Sepe,  Jake Weary y Olivia Luccardi, la película nos narra primeramente la historia de Jay (Monroe), quien se la pasa bien con su hermana (Sepe) y sus amigos (Gilchrist & Luccardi); y cuando no está con ellos sale con su nuevo novio (Weary), solo que ya que tienen sexo en su carro en medio de la nada, él la droga, la amarra y la lleva a un edificio abandonado donde le dirá que le ha transmitido una maldición extraña, la cual sólo la podrá atrasar si tiene sexo con alguien más, sino un ser transmorfo la seguirá hasta hallar la forma de asesinarla... Obvio, como la chica es guapa, sabido esto, más de uno se postulará para que les transmita al fantasma venereo; no obstante, entre la extrañeza de la maldición y la moral de la chica, preferirá buscar una forma de darle fin al "demonio" ayudada de sus inseparables y fieles amigos.
Con una peculiar manera de presentar una película de temática sexual, una historia y actuaciones sólidas y hasta la posible referencia ñoña de una muerte a otra que sucede en la clásica primer parte de Pesadilla en la Calle del Infierno (Elm Street), gracias al internet, nos enteramos de la existencia de este proyecto más allá de la distribución B en la que se encontraba, brindándonos una de las más gratas experiencias en el cine de terror de los últimos años, refrescando el género como pocas veces se ve, pudiendo abrir puertas a lo que podría ser una nueva gran franquicia o solo quedándose ahí expuesta como un evento único que se sostiene a sí mismo por la bienhechura de sus generadores.
Completando la experiencia con un destacado soundtrack del apodado Disasterpeace (Rich Vreeland), la cinta es un absoluto recomendado de la más reciente generación terrorífica que devuelve la fe en la magia escalofriante del séptimo arte, esperando que inspire no solo a los directores, sino a los productores también, a hacer buen cine con la única y básica meta de dejar de subestimar y menospreciar al público del que viven.